Sorrento (ソレント, Sorento) es un personaje principal del manga spin-off Saint Seiya: Rerise of Poseidon. El va al Templo de Nemesis para descubrir el origen de la lluvia de meteoritos sobre la Tierra.
Apariencia[]
Sorrento es un joven de apariencia suave y delicada, de cabello lila y grandes ojos rosas. Su piel es de un tono moreno.
En general, Sorrento luce siempre de un porte elegante, tanto con su Scale como con su ropa de civil. Tanto vistiendo su Scale o sin ella, Sorrento siempre lleva consigo su Flauta.
Personalidad[]
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Historia[]
Pasado[]
De pequeño, Sorrento perdió a sus padres a una edad muy temprana y sus padres adoptivos solo pensaban en su talento musical como una herramienta para su propio éxito. De todos modos, el joven Sorrento se lanzó a una genuina devoción hacia sus estudios y a mejorar su talento musical, por lo que consiguió ingresar a una prestigiosa escuela de música. Sin embargo, aquel maldito lugar estaba también lleno de arrogancia, envidia y sed de poder. Sorrento pensaba que el sonido de su flauta solo debería pertenecer a las personas de corazón puro, pero para su decepción, el mundo de los humanos estaba muy contaminado para ser digno de ello. Es por eso que, cuando Sorrento oyó el llamado de Poseidon para purgar y salvar este mundo, el no dudó en aceptarlo.[1]
- Nota: La información de esta parte del artículo sólo cubre la aparición del personaje en Saint Seiya: Rerise of Poseidon, que cronológicamente tiene lugar después de los acontecimientos del manga original de Saint Seiya. Si quieres conocer la historia de Sorrento durante el Arco de Poseidon y el Arco del Elysion, tendrás que consultar la página dedicada a "Sorrento de Siren".
Una Melodía Familiar[]
Tras el Greatest Eclipse de Hades, Sorrento siguió junto con Julian Solo sin percatarse de si su señor había vuelto. Cuando comenzó la lluvia de meteoritos sobre la Tierra, Sorrento se dirigio a Ramnunte, para investigar la aparición de un templo en las ruinas que deberían haber allí.[2]
Cuando Sorrento llegó al lugar, vio a dos caras conocidas, eran la Silver Saint, Shaina de Ophiuchus y el joven aprendiz de Saint Kiki. Al ver que estaban teniendo problemas con un grupo de esqueletos armados, Sorrento uso su flauta para distraer a los enemigos.[2]
Al darse ambos cuenta de su melodía, Shaina y Kiki se sorprenden de volver a verlo. Sorrento, con una sonrisa, les responde que ha pasado tiempo y que les agradece lo del Templo Submarino. El pequeño Kiki, exaltado, le pregunta a Sorrento si es el que ha hecho aparecer a los esqueletos, ya que él creía que ahora no era su enemigo. Justo en ese instante, Sorrento destruye a un esqueleto que intentaba atacarlo, entonces, Sorrento niega que esas monstruosidades sean cosa suya y procede a acabar con ellos con su Dead End Symphony.[2]
Una vez eliminados, Kiki se pone muy contento y dice que es bueno tenerlo de su lado, pero Sorrento le indica que el no lo es, que solo vino para saber lo que había provocado esta calamidad. Shaina le pregunta si esta situación no es cosa de Poseidon, a lo que Sorrento le responde confirmando que es así, contándole la situación de Julian.[2]
De repente, son interrumpidos por una voz que indica que los intrusos que acabaron con los Spartoi no sólo eran Saints, sino también un General Marina. En ese momento, algo los ataca por sorpresa, dejando fuera de combate a Sorrento, Shaina y Kiki. El nuevo enemigo aparece y les dice que los llevara al templo de su diosa para que ella decida su castigo.[2]
Nemesis, la Diosa de la Venganza[]
Sorrento, Shaina y Kiki, llegan al interior del Templo de Nemesis, son traídos como intrusos por haberse colado en aquellas tierras. La diosa Nemesis mira con desprecio a los invasores y se ríe burlonamente de ellos por atreverse a entrar en sus dominios. Sorrento se disculpa por sus actos y le pide que le explique por qué ha aparecido ahora. Kádmos se muestra molesto por ello, pero Nemesis le detiene y decide responderle ya que se siente generosa. Así que se levanta de su trono y comienza a presentarse, explicando que el motivo de su llegada se debe a la gran insolencia de los humanos hacia los Dioses. Nemesis les recuerda que los tres principales dioses del Inframundo han muerto por culpa de los humanos, indicando que este es el crimen más grave hasta la fecha. A esta afirmación, Kiki responde que lo hicieron para proteger a las personas, ya que Hades pretendía transformar este mundo en una tierra de muertos. Sin embargo, ella replica que los humanos deben respetar, en silencio, las decisiones de los dioses. [2]
Sorrento, sorprendido, le pregunta si esa es la única razón por la que va a hacer sufrir a la gente. Entonces, Nemesis, empieza a corregirle y hace que se abra la cúpula de su templo. Todos miran al cielo y ven la luna con un color carmesí y con un tamaño el doble de grande, pero Nemesis les corrige indicándoles que no es la Luna, sino que en realidad es el astro que ella gobierna, el asteroide Adrastea. Para ejecutar el castigo divino lo arrastra hacia el planeta y en diez horas se acercará lo suficiente como para que la atracción gravitatoria del planeta lo despedace y sus fragmentos caigan sobre él, destruyéndolo todo por completo. Nemesis les dice que si la razón de los humanos para matar a los dioses era proteger la Tierra, entonces hacerla desaparecer será el castigo más apropiado. [2]
Tras explicarles su plan, Nemesis se da la vuelta y les ordena que se marchen, pero se detiene al escuchar el sonido de una flauta. Es Sorrento quien, ante la respuesta de Nemesis, decide luchar contra ella. Nemesis le ordena que se detenga, ya que sólo acelerará su muerte, pero él no lo hace, sino que comienza a atacarla con su Dead End Climax, hasta que es golpeado por Kádmos, lo que le hace detenerse. Shaina y Kiki intentan ayudarle, pero dos nuevos guerreros aparecen para detenerlos. Kádmos se dispone a matar a Sorrento, pero justo cuando va a hacerlo, aparece el Tridente de Poseidon, haciendo que todos se sorprendan, momento que aprovechan Sorrento, Shaina y Kiki para agarrar el tridente y ser teletransportado por él fuera de allí. [2]
El Regreso de los Siete Generales[]
Sorrento, Shaina y Kiki son teletransportados al Cabo Sounion, donde allí se encuentran a Poseidon, ahora llevando el cuerpo de Julian, pero no esta solo.[2]
Sorrento se da cuenta que los Generales que habían fallecido se encontraban junto con él vistiendo unas Surplices que imitaban sus Scales originales. Ahora todos reunidos, Poseidon ordeno que lucharan con todas sus fuerzas para detener el castigo divino de Nemesis.[2]
Empieza la nueva batalla[]
Poseidon les explica que ha recibido una petición de Hades para detener los planes de Nemesis, ya que es una diosa que no tiene límites, por lo que planea destruir completamente la Tierra en 10 horas mediante una lluvia de meteoritos, algo imperdonable, pues sin la tierra y el mar, la existencia de Hades y Poseidon no tendría sentido. Así que pide a su ejército que le ayude a proteger la Tierra, algo que ellos aceptan. Entonces, Poseidon se corta la mano usando su Tridente y arroja su sangre sobre ellos, convirtiendo las Surplices en Scales y reparando también el daño de la Scale de Sorrento, restaurando así las Scales de los Marinas. Tras esto, Poseidon les ordena ir al Templo de Nemesis para detener a la diosa, mientras que él se quedará en ese lugar para fortalecerse y cubrir los mares con su cosmos, ya que planea utilizarlos para proteger a la Tierra de la lluvia de meteoritos, y cuando esto termine promete seguirles y derrotar a Nemesis junto a ellos.[3]
Los Generales abandonan el lugar y a toda velocidad se dirigen al Templo de Nemesis, pero pronto son interceptados por un guerrero que les ataca desde el aire con una patada, a lo que Krishna reacciona rápidamente y utiliza su lanza para bloquear su ataque. Seguidamente, el guerrero se presenta como Bellerophōn y afirma ser uno de los Spirits al servicio de Nemesis, quien ha venido a asesinar a Poseidon. Krishna se queda atrás para enfrentarse a él y proteger a su dios, mientras pide a sus compañeros que se dirijan al Templo de sus enemigos. Sin embargo, en medio del camino, Sorrento, Baian e Io, son separados del resto y quedan atrapados en el espacio ilusorio, Baian e Io intentan librarse de la ilusión, pero no es hasta que Sorrento utiliza la música de su Flauta para neutralizar la ilusión. Una vez hecho esto, Terpsichóra aparece frente a ellos y les revela su nombre a la vez que les reta a un combate, por lo que Sorrento decide quedarse a luchar con ella y pide a Io y Baian que se adelanten.[3]
Siren contra Musica[]
Sorrento lanza su Dead End Symphony, mientras que Terpsichóra responde con su Suite Phantasm, quedando ambas técnicas chocando en perfecto equilibrio. Mientras Terpsichóra sigue tocando su arpa, comenta la leyenda de las Sirenas e indica que su canción no la afectará.[4]
Terpsichóra, le pregunta a Sorrento porque dejó ir a los otros dos, ya que si ellos hubieran atacado todos juntos, tal vez habrían tenido alguna oportunidad. Sorrento responde, mientras sigue tocando su flauta, que tres hombres contra una mujer habría sido injusto. Terpsichóra se ríe de la respuesta de Sorrento. Sorrento se sorprende de la reacción de la guerrera. Terpsichóra con confianza le dice que incluso si hubiera más, el resultado habría sido el mismo. De pronto, Sorrento se detiene al notar como la técnica de Terpsichóra lo tiene inmovilizado.[4]
Aun así, Sorrento sigue tocando la flauta, mientras le pregunta a Terpsichóra si la Ilusión es cosa suya, afirmándolo ella. Terpsichóra cuenta como su arpa de Musa se batió contra monstruos mitológicos e incluso Sirenas y siempre salió victoriosa. Entonces, Terpsichóra anuncia que empezara a tocar la melodía que acabara con Sorrento, respondiendo este que el lo hará primero. Sorrento confía que en cuanto su melodía llegue al cerebro de su adversaria esta se debilitara y podrá acabar con ella.[4]
Sin embargo, una corriente de viento se impone ante la música de Sorrento, acabando este rodeado por dicha corriente. Terpsichóra deja de tocar su arpa y comienza a explicarle a Sorrento las fases de su técnica, siendo la última fase la que provoca una ilusión en Sorrento que toma forma de Shun de Andromeda. Sorrento empieza a recordar esa sensación, toda esta situación hace que Sorrento se confunda por el miedo y es golpeado por la ilusión del Nebula Storm, el cuál manda por los aires a Sorrento.[4]
Terpsichóra ha terminado su concierto y el último sonido que se escucha es la caída de Sorrento, quien cuya scale ha quedado dañada. Sorrento se lamenta de haber caído en la ilusión del enemigo, aunque no entiende por que ha sufrido daño por ello. Terpsichóra le explica que lo que ha experimentado es similar al efecto placebo, que su cuerpo ha sido engañado. Entonces, Sorrento, quien trata de ponerse en pie, le pregunta a Terpsichóra porque sirve a una diosa que intenta acabar con toda la humanidad, incluida ella que es humana. Terpsichóra responde que no entiende lo que dice y entonces comienza a explicarle que son los Spirits.[4]
Tras su explicación, Terpsichóra ataca de nuevo al malherido Sorrento con la Nebula Storm ilusoria, haciendo que este caiga de nuevo al piso e incluso logra romper el suelo. Un herido Sorrento intenta volver a levantarse, pero con mucha dificultad, Terpsichóra se burla de él y le ordena que se rinda ya, Sorrento molesto le pregunta el porque y Terpsichóra le empieza a explicar. [1]
Su Reminiscencia consiste en proyectar un recuerdo del cuerpo y del corazón, en donde el estuvo más cerca de la muerte, es decir, un momento de la vida en el que nunca pudo superarlo con todas sus fuerzas. Esta explicación sorprende a Sorrento, pero ahora por fin lo entiende. Sin embargo, Sorrento, quien se levanta a duras penas, decide no rendirse, ya que en la anterior batalla perdió a sus camaradas y que ahora que han vuelto para combatir una vez más, el debe luchar. [1]
Sorrento consigue levantarse, pero con gran dificultad y piensa que como alguien que sobrevivió a aquella batalla no puede vivir asustado del pasado, por eso hoy va a superar el miedo que yace en su corazón. Terpsichóra vuelve a atacar a Sorrento con la ilusión de Shun de Andromeda, pero Sorrento afina sus sentidos y fortalece su corazón para vencer la ilusión creada por la Spirit. Consiguiendo esta vez que su música se imponga en la melodía de Terpsichóra, ella se sorprende de que Sorrento haya neutralizado su melodía, pero Terpsichóra, quien sigue tocando su arpa, se prepara para su movimiento final y realiza su Suite Phantasm Finale. [1]
El sonido que produce esta técnica silencia y oscurece todo a su alrededor, dejando solamente a los dos guerreros en un vació de oscuridad y pisando solamente ambos una pequeña porción de suelo. Sorrento angustiado pregunta donde están, Terpsichóra le responde que están en el desenlace de la humanidad, en la nada absoluta, un escenario pacífico sin odio y sin conflicto. Esta idea de eliminarlo todo perturba a Sorrento, pero luego Terpsichóra se queda pensativa, y le cuenta a Sorrento sobre como ella era antes una de las Musas, quien pensaba que con su música la paz gobernaría sobre la Tierra. [1]
Tras la explicación de Terpsichóra, un entristecido Sorrento intenta hacerla cambiar de opinión, pero ella no lo escuchara, ya que incluso abandono su condición de diosa. Por eso, Terpsichóra le indica a Sorrento que demuestre su fuerza para saber si los humanos tienen el derecho de vivir, por que sino el caerá con ellos. La melodía de Terpsichóra retoma sus notas en el arpa lo que provoca que el suelo en donde se encontraba Sorrento comience a desmoronarse, Sorrento quien se encontraba herido y agotado, no es capaz de actuar a tiempo y cae en infinita oscuridad. [1]
Mientras caía en la oscuridad, Sorrento empieza a recordar su triste pasado y la voz de Terpsichóra llega a la mente de Sorrento quien le comenta que Athena es la única que ve a los humanos como arte, pero Terpsichóra le indica que ella está equivocada, ya que los humanos solo contaminan el universo. Sin embargo, Sorrento grita que no es así en respuesta a sus pensamientos, puede que el no conozca el amor ni crea en el, pero que una vez el sintió algo y fue cuando estuvo con Saori Kido (Athena) y le mostro su enorme e inquebrantable Cosmos. [1]
Además, durante el viaje con Julian conoció un sin fin de sonrisas inocentes, asegurando que eso no fue una ilusión y eso es algo que Sorrento quiere proteger, junto con los Saints de Athena, Sorrento quiere proteger este mundo. Por ello, Sorrento, aún cansado y herido, hace arder al máximo su Cosmos para conseguir iluminar esta oscuridad con la luz de la verdad. De esa forma, en la infinita oscuridad, nace una estrella que ilumina la zona, siendo esa estrella la nueva forma de la Scale de Siren de Sorrento, quien con su flauta toca su melodía y rompe la oscuridad de Terpsichóra. [1]
Terpsichóra sorprendida se pregunta que es esa nueva armadura y Sorrento también está sorprendido del cambio de su Scale en respuesta a su Cosmos. En ese momento, una voz se oye en la mente de Sorrento quien le indica que esa es la verdadera forma de su Scale. Sorrento encuentra la persona a la que pertenece esa voz, es alguien cuyo espíritu ha tomado forma de una pequeña sirena, Thetis de Mermaid. [1]
Tras la explicación de Thetis, Sorrento se alza al cielo y toma su flauta para acabar de una vez con Terpsichóra. Ella, temblorosa, retoma las notas musicales para volver a invocar la oscuridad, pero esta es disuelta ante el luminoso cosmos de Sorrento, dejando a Terpsichóra perpleja. Sorrento se prepara para tocar su flauta, la música y la luz empieza a envolver a la antigua Musa, e invoca su Heavenly Concerto. [1]
Después de vencer a Terpsichóra, su cuerpo desaparece, dejando solo su Shell. Sorrento, sorprendido, observa como la armadura también desaparece, luego, observa con asombro su nueva Scale y vuela rápidamente para decirles este secreto a sus camaradas. [1]
Habilidades[]
- Como un Marina puede controlar la energía conocida como cosmos.
- Los Marinas tienen una agilidad y velocidad sobrehumanas, lo que les permite dar enormes saltos y correr 60 kilómetros en 30 minutos, por lo que pueden alcanzar una velocidad de 33.33 m/s (superior a la alcanzada en el récord mundial masculino de 100 metros lisos) [5].
- Con su melodía, Sorrento es capaz de anular ilusiones.
Curiosidades[]
- La Scale de Siren de Sorrento todavía presenta los mismo daños que tuvo durante su combate contra Shun de Andromeda, en el Templo Submarino, en el manga de Saint Seiya. A diferencia del anime, donde no presenta estos daños.
- Es la segunda que vez Sorrento no consigue ejecutar su Dead End Climax, siendo la primera vez cuando lucho contra Shun de Andromeda y este uso su Nebula Storm.
Referencias[]
- ↑ 1,00 1,01 1,02 1,03 1,04 1,05 1,06 1,07 1,08 1,09 1,10 Rerise of Poseidon - Capítulo 4.
- ↑ 2,0 2,1 2,2 2,3 2,4 2,5 2,6 2,7 2,8 2,9 Rerise of Poseidon - Capítulo 1.
- ↑ 3,0 3,1 Rerise of Poseidon - Capítulo 2
- ↑ 4,0 4,1 4,2 4,3 4,4 Rerise of Poseidon - Capítulo 3
- ↑ Rerise of Poseidon - Capítulo 2, pág. 23
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